La Comisión Europea ha publicado los datos de las instalaciones emisoras de CO2 en 2018, y entre los mayores contaminantes europeos destacan sobre todo las centrales de carbón, que copan los diez primeros puestos del continente, salvo una notable excepción, la aerolínea Ryanair. La compañía se ha convertido en la primera empresa de transporte que aparece en este top 10 anual. No obstante, el Centro de Investigación Transporte y Medio Ambiente radicado en Bruselas llama a introducir nuevas regulaciones para que las aerolíneas cambien de combustible.

 

En cuanto a los mayores emisores de España, en el top 10 aparecen centrales térmicas, plantas siderúrgicas, y refinerías de petróleo, mientras que la compañía aérea Vueling está en el puesto 12º.