2906180612_91dfc6d471_0La creatividad es una cualidad que aunque tradicionalmente se ha asociado con disciplinas artísticas, poco a poco se ha ido vinculando al mundo empresarial. Pero, si la creatividad es una parte integral de los negocios, o al menos, debiera serla ¿Cómo y cuándo ocurre? ¿Qué condiciones la propician? La profesora Teresa Amabile, de la Harvard Business School, sostiene que, a pesar de ser cierto que la creatividad tiene un componente casi innato, las empresas u organizaciones pueden llevar a cabo acciones muy concretas para fomentarla.

Eso es lo que sostiene también Frans Johansson en lo que ha denominado モEl efecto Mediciヤ y que da título a su último libro. Y es que a lo largo del siglo XV en Florencia surgió una revolución creativa de la mano de la familia Medici en la que diversas disciplinas sufrieron una inusitada fecundidad creativa e innovadora.

En su libro plantea que hay tres fuerzas revolucionarias que dan lugar a ideas creativas: el movimiento-reacción de las personas, la convergencia de disciplinas científicas y el salto en capacidad computacional. Según él, estas tres fuerzas están incrementando el número de cruces e interacciones y, por lo tanto, multiplicando la generación de nuevas ideas.

En lo que al movimiento de las personas se refiere, la globalización, el cada vez más fácil acceso a los desplazamientos y los movimientos migratorios (mientras que la migración en el siglo XIX era hacia espacios vacíos, en el siglo XX es de extranjeros a países habitados) hacen posible que aumente de forma exponencial nuestra capacidad de relacionarnos con personas de muy diversa procedencia y cultura.

La convergencia de la ciencia juega un papel importante ya que las  Intersecciones de disciplinas científicas diferentes dan  lugar a nuevos descubrimientos. Expertos en diversas disciplinas coinciden en que la especialización o los nuevos descubrimientos a nivel científico en disciplinas puras están muriendo.

Por otro lado, internet permite que la aumente la capacidad de interacción entre personas dedicadas a campos antagónicos o no relacionados. Las herramientas de comunicación avanzada, las redes sociales, los blogs, foros, wikis y lo que se han denominado herramientas 2.0 contribuyen especialmente a la creación  de redes y nuevo conocimiento.  En cuanto al salto computacional, la velocidad de procesamiento de datos aumenta cada día mediante hardware cada vez más potente de forma exponencial, abriendo nuevas posibilidades.

Uno de los ejemplos más intuitivos de cómo las redes e intersecciones favorecen la creación de nuevo conocimiento y fomentan la creatividad e innovación fue el que expuso Juan Freire en su ponencia del Día del Emprendedor comparando la situación de Cleveland frente a Silicon Valley.

Lo que se puede observar en la siguiente imagen es un mapa que nos muestra la capacidad de interacción y relación entre los agentes que componen es el mapa empresarial de Cleveland.

A continuación, tenemos la imagen correspondiente al tejido empresarial en Sillicon Valley. Si observamos la conexión existente entre las empresas/agentes y el número de intersecciones parece a bote pronto comprensible el éxito de la región en cuanto a creación de empresas innovadoras que le ha proporcionado fama mundial.

Como no podía ser de otra forma, no todo es bonito alrededor de la intersección, y es necesario probar ideas que fallan para encontrar las que funcionan. Innovar es fracasar por lo que es importante recompensar el fracaso.

Hay que tener claras algunas cosas tales como que no ejecutar ideas es el mayor fracaso, que la gente debe aprender de los errores o que es conveniente que exista un índice de fracasos medio para que el equipo no se degrade. Pero en todo momento no hay que perder de vista que Asumir riesgos es esencial para convertir una idea interseccional en innovación.

Como leí hace poco en モLiderando la revoluciónヤ de Gary Hamel, nunca hasta ahora la diferencia entre lo que soñamos alcanzar y lo que podemos alcanzar fue tan pequeña.