Móviles, relojes y ahora también edificios, la tecnología se “empeña” una vez más en dotar de inteligencia a sus creaciones, lo último; el edificio”The Edge” en Amsterdam. Esta edificación propiedad de la americana Deloitte es capaz de recopilar información de los usuarios que trabajan en el día a día para conseguir la mayor de las eficiencias posibles en cuanto al uso de energía respecta, y adaptarse a la rutina de los trabajadores confeccionando un patrón de funcionamiento eficiente.
Con este nuevo sistema que, poco a poco, se irá implantando en otros edificios, se espera dar una respuesta más a los retos que el cambio climático propone al planeta, buscando la sostenibilidad y el consumo responsable de energía.
The Edge recopila la información gracias a 28.000 sensores ubicados a lo largo del edificio que recopila datos e información que considera relevante, así mismo, todos los trabajadores del edificio cuentan con una app en la que pueden ir anotando las mejoras que consideran posibles.