De la mano de Tecnalia y AIC-Automotive Intelligence Center nos llega una “vuelta” de tuerca más a los coches eléctricos y es que esta colaboración entre las dos entidades ha conseguido diseñar un prototipo de rueda con un motor instalado en su interior.
El objetivo de este avance parece claro, dejar espacio en el interior del vehículo para rediseñarlo y dar pie de esta forma a una mejor planificación del vehículo aumentando su eficiencia.
El proyecto ha superado todas las pruebas de estrés a las que ha sido sometido y según los diseñadores de la misma también servirá para facilitar la connducción.
La razón principal por la que se están llevando a cabo proyectos es porque, en propias palabras de los ingenieros que han llevado el proyecto, “la movilidad europea mediante vehículos eléctricos se ha convertido en un factor clave para el desarrollo de la futura sociedad sostenible. Sin embargo, a pesar de la importancia que se prevé, existen todavía algunas dificultades tecnológicas en el almacenamiento energético y en la propia tracción de los vehículos”.