A pesar de que la banca digital a día de hoy es un negocio incipiente, es uno de los principales quebraderos de cabeza de los gigantes del sector. Se sabe que el futuro de los bancos pasa por la digitalización pero el problema está en cómo hacerlo. A pesar de que el feedback entre cliente y bancos está muy presente, se espera un futuro en el que todas las operaciones puedan realizarse mediante el Smartphone o el ordenador.
El proceso debe ser alimentado por los clientes que a medida que las generaciones avancen, preferirán operar tecnológicamente a tener que desplazarse para hacer operaciones concretas en las que los costes de transacción son mayores. Según datos publicados por Deloitte, a día de hoy el 55% de los usuarios bancarios trabaja a través de las oficinas; entre el 30% y el 35% utiliza simultáneamente canales on line y físicos, y entre el 15% y el 20% solo, o casi solo, emplea medios digitales.
El problema surge en el coste de este proceso de convertirse en banca digital puesto que los bancos deben mantener sus plantillas a la vez que realizan fuertes inversiones en tecnología. Aun así, no parece ser un inconveniente para los grandes bancos como BBVA, Santander o CaixaBank entre otros que temen la inminente llegada de gigantes tecnologicos como Apple o Google que no tardaran en ofrecer servicios financieros.
En una reciente publicación de el país, se mostraron las inversiones de los principales bancos, que fueron las siguientes:
· CaixaBank: Entre 2011 y 2014 afirma que ha destinado 666 millones a los desarrollos digitales.
· BBVA: Desde 2008 ha invertido unos 6.500 millones en tecnología.
· Santander: Invierte unos 900 millones anuales en tecnología.
Los jóvenes esperan que en el futuro el servicio ofrecido por los bancos sea digital, de calidad y seguro. Según la consultora de tecnología Capgemini, en España solo el 25,6% de los jóvenes consultados (Nacidos a partir de 1980) en una encuesta de 2014 dijo estar satisfecho con estos servicios. Toca ponerse las pilas y parece que algunos ya han apostado fuerte por ello mientras otros esperan a ver como les funciona a los pioneros. Jugada arriesgada esta ultima que puede conllevar quedarse muy atrás pues la implementación tecnológica es un proceso lento en el que los pioneros siempre juegan con ventaja. Veremos cómo avanza todo en los próximos años y esperemos que todo sea a mejor.