La tecnología de las renovables es cada vez más madura y sus costes van en descenso. Desde 2009, el precio de la energía solar ha descendido un 62%, y según apunta Bloomberg, en 2025 la energía solar será más barata a nivel global que el uso del carbón. Un escenario favorable para la necesaria “descarbonización” del planeta, clave para evitar que el calentamiento global sobrepase los 2ºC.

 

Ya en 2016, países como Chile y los Emiratos Árabes Unidos han generado electricidad proveniente del sol con un coste inferior a los 3 céntimos de euro por kilovatio-hora, la mitad del coste promedio global de la energía del carbón. Ante este contexto, países como Jordania y México planean cerrar proyectos de nuevas grandes plantas solares este 2017. Arabia Saudí, el país que más crudo exporta y que más petróleo para producir electricidad, aspira a convertirse en una potencia de la solar. Mientras tanto, España, con un gran potencial de uso del sol, está quedando rezagada, aunque aún está a tiempo de recuperar protagonismo.

 

Las innovaciones tecnológicas, las economías de escala y la experiencia en la producción han reducido los costes de la solar en la última década, incrementándose la ventaja competitiva sobre las energías fósiles. Según calcula Bloomberg, el coste promedio por vatio en 2025 será de 70 céntimos de euro, un descenso del 36% respecto a los 1,10€ actuales. Además del abaratamiento de precios, se debe tener en cuenta que la solar genera dos veces más empleo por unidad de generación eléctrica que el gas y el carbón juntos, según la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA).

 

La solar abaratará al carbón más tarde o temprano dependiendo del país. En países que importan carbón o desincentivan el carbón con impuestos, en Europa o Brasil, la solar lo abaratará en la década de los 2020 o incluso antes. En países con grandes reservas de carbón como China, el hito ocurrirá en 2030, si bien recientemente el gigante asiático supero a Alemania como la nación con la mayor capacidad solar instalada.